Entre hambre y zozobra Caucagüita enfrenta el coronavirus: una lucha que mitiga Fundación Impronta

Entre hambre y zozobra Caucagüita enfrenta el coronavirus: una lucha que mitiga Fundación Impronta

El coronavirus y la consecuente medida de cuarentena que busca contrarrestar la agresiva propagación del virus que, contabiliza ya más de 52.000 muertos a nivel mundial, llega a Venezuela en medio de una economía quebrada, sin bases productivas dónde asentarse, una dolarización artificial que no representa un progreso real y que pone en jaque a la población más vulnerable que vive del "día a día". En este contexto Fundación Impronta interviene para hacer la diferencia en el sector Caucagüita.

En medio de las limitaciones que involucran los llamados a la población a mantenerse en casa y la necesaria protección personal, un equipo mínimo de Fundación Impronta da continuidad al trabajo ya iniciado en 2019 en la comunidad que mantiene como centro piloto de su gestión.

Allí, la zozobra está a la orden del día. La crisis de los servicios públicos hace prácticamente imposible el cumplimiento de las normas mínimas de seguridad que permitirían el combate del coronavirus dentro del esquema de la cuarentena.

La escasez de agua y gas hacen aún más amarga la cotidianidad que ya es suficientemente dura al impedir el normal funcionamiento de la economía diaria, esa que permite la sobrevivencia de los más vulnerables y es allí cuando la pandemia cobra otro matiz.

Mitigar estas carencias está en el foco de atención de Bernardo Guinand, quien al frente de la ONG, explica que, gracias a una donación recibida por la Compañía de Jesús de América Latina se hizo posible una primera ayuda alimentaria para alrededor de 21 familias, lo cual también se logró gracias a la coordinación establecida con pequeños comerciantes de la propia comunidad quienes ofrecieron sus productos a precios competitivos dinamizando sus economías.

La actividad logró dinamizar la economía de pequeños comerciantes de la comunidad/ Foto: José Fernandes

En total, 36 adultos, 54 niños y 12 adolescentes resultaron favorecidos en la jornada.

Foto: José Fernandes

 

Foto: José Fernandes

 

Foto: José Fernandes

Un exhaustivo estudio previo de las condiciones socio económicas de la población allí asentada permitió, en este caso, identificar a las familias que estarían en una situación de mayor precariedad y que precisarían con urgencia el respaldo canalizado por Impronta.

La ayuda llega en un momento profundamente crítico para todas y cada una de las familias.

Foto: José Fernandes

 

Foto: José Fernandes

 

Foto: José Fernandes

En una próxima segunda etapa se prevé ampliar el margen de beneficiados fundamentados en esta información recopilada meses atrás.

"Arrancamos ya con una campaña de recaudación para crear un fondo anticipándonos así a la posibilidad de que se prolongue la cuarentena. Nosotros nos encargaríamos de la logística, compra y entrega de alimentos garantizando la transparencia, la oportunidad de costo, el buen uso de los recursos a fin de ayudar a un buen número de familias", así explica Guinand la tarea en curso de Impronta.

 

Foto: José Fernandes

En este sentido dio a conocer las implicaciones de la alianza con Alsi Foundation, iniciativa creada en Estados Unidos por estudiantes egresados del Colegio San Ignacio que han venido apoyando a organizaciones como Fe y Alegría, Oscasi y ahora, Impronta.

"Vamos a hacer uso de la plataforma de recaudación de Alsi Foundation que es muy expedita y confiable. Nos apoyamos mutuamente. Ellos quieren ayudar a Venezuela a salir de situaciones tan duras como las que vivimos regularmente y sobre todo como las que se viven en este momento", aseguró Guinand.

Las personas interesadas en respaldar la labor de la Fundación Impronta tienen a su disposición la cuenta del Banco Mercantil, 0105 0018 4110 1866 9558 RIF J-409230120, impronta.venezuela@gmail.com.

Asimismo Alsi Foundation extiende la opción de ayuda mediante el siguiente link https://donorbox.org/cuarentena-en-caucaguita

 

Foto: José Fernandes